Este es el fin,
hermoso amigo.
Este es el fin
mi único amigo, el
fin.
De nuestros elaborados
planes, el fin,
de todo lo que
permanece en pie, el fin.
No más seguridad o
sorpresa, el fin
Nunca te miraré a los
ojos... de nuevo.
Puedes imaginarte lo
que será,
tan ilimitado y libre.
Necesitando
desesperadamente la mano de un extraño,
en una tierra
desesperada.
Perdidos en un
desierto romano de dolor,
y todos los niños
están locos,
todos los niños están
locos,
esperando a la lluvia
de verano, sí.
Hay peligro a las
afueras de la ciudad,
recorre la autopista
del Rey, nena,
extrañas escenas
dentro de la mina de oro.
recorre la autopista
hacia el oeste, nena.
Monta la serpiente,
monta la serpiente,
al lago, al antiguo
lago, nena.
La serpiente es larga,
siete millas.
Monta la serpiente.
Es vieja, y su piel es
fría.
El oeste es lo mejor.
El oeste es lo mejor.
Llega hasta aquí y
nosotros haremos el resto.
El autobús azul está
llamándonos,
el autobús azul está
llamándonos.
Chofer, ¿dónde nos
llevas?
El asesino despertó
antes de que amaneciera,
se puso las botas,
cogió una cara de la
antigua galería,
y bajó hasta el
vestíbulo.
Entró en la habitación
en que la vivía su hermana,
y entonces él
visitó a su hermano, y
entonces él,
él bajó hasta el
vestíbulo y,
y llegó hasta una
puerta,
y miró dentro.
Padre, ¿si hijo?,
quiero matarte
Madre… quiero…
Vamos nena, aprovecha
la oportunidad con nosotros,
vamos nena, aprovecha
la oportunidad con nosotros,
vamos nena, aprovecha
la oportunidad con nosotros,
y reúnete conmigo detrás
del autobús azul.
Haciendo una piedra
azul,
en un autobús azul.
Haciendo una piedra
azul.
Vamos, sí.
Matar, matar, matar,
matar, matar, matar
Este es fin,
hermoso amigo.
Este es el fin
mi único amigo, el fin.
Duele dejarte libre,
pero tú nunca me
seguirás.
El final de las
carcajadas y las mentiras piadosas,
el final de las noches
en las que tratamos de morir,
este es el fin.
(The Doors: “Este es
el fin” 1967)